Desde pequeños, escogen y manipulan materiales, expresan ideas, indagan, realizan planes y proyectos a partir de sus intereses y reflexionan acerca de lo que hacen.
Los estudiantes generan su propio conocimiento, afrontando retos que impulsan la iniciativa, la creatividad y las relaciones sociales.
Los niños aprenden en un contexto bilingüe. Aprenden el inglés de una manera natural, así como lo hacen con su lengua materna a través de actividades que fomentan el desarrollo de ambos idiomas.
En el IBI los niños y niñas aprenden explorando y descubriendo a través de la experiencia, y el juego es una herramienta clave para lograr un aprendizaje significativo.